El Cuerpo: contenedor de Vida

 

Lo más valioso de la Vida no puede ser visto o tocado. 

Habrá de ser sentido con el corazón.

Suena el despertador y sentimos no tener el ánimo suficiente para poder comenzar un nuevo día, salir a emprender una nueva jornada de trabajo, de estudios, que no nos apetece ni disfrutar de  un paseo, ni compartir con la familia etc. Además, nos podemos sentir muy enfadados o tristes o solos o...

¿Qué está pasando?

Algunos podremos decir que hemos perdido la motivación laboral, que estamos muy cansados, que nos sentimos muy tensos y agotados, muy sobrecargados física y anímicamente... etc.

Podemos sentir una gran acumulación emocional que se nos manifiesta en forma de tensiones musculares cada vez más sobrecargadas y pesadas... o sentir que deseamos reír a pierna suelta pero... no nos sale la risa verdadera... o queremos llorar pero se nos queda todo en la garganta hecho un nudo... o, quizá, el nudo lo sentimos en la boca de nuestro estómago y nos produce grandes molestias, ardores y malas digestiones.

Caminamos el día a día de nuestra cotidianeidad sintiendo un gran peso en nuestras espaldas, dolores crónicos en nuestras cervicales, punzadas terribles en nuestra espalda media, o quizá, podremos sentir que nos partimos a la mitad por la zona lumbar... más aún, quizá sintamos nuestras piernas pesadas como el plomo, las extremidades frías y sin riego... quizá... quien sabe cuantas sensaciones màs...

¿Qué nos está pasando?

Si ponemos atención a los mensajes que nos envían nuestros órganos, articulaciones, huesos, líquidos... ¿qué nos quieren decir? ¿qué necesitan?   ¿qué nos están pidiendo?

Si atendemos a los síntomas de nuestra cotidianeidad como si de voces sutiles se tratasen... ¿De qué nos están hablando?

 

El cuerpo nos "habla" y otras veces... nos "grita" a través de los síntomas. 

Habla y grita pues, el cuerpo, es el único medio por el cual existe una posibilidad de expresión de lo reprimido o contenido, dado que a nivel consciente, existen barreras que imposibilitan esa salida para llegar a vivir desde una integración completa entre mente cuerpo y emoción.

Este cuerpo que contiene nuestra vida posee su lenguaje y trata de comunicarnos lo que nos está sucediendo de verdad en nuestra vida y lo que necesita para restablecer el equilibrio en la misma.

¿Quieres eliminar la tensión y el estrés acumulado?

¿recuperar la  vitalidad, energía y alegría?

Hoy, vamos a proponer Tres valiosas técnicas para recuperar el equilibrio necesario: 

1... Reflexología podal:

La planta del pie y el pie en su conjunto representan en forma esquemática la totalidad del cuerpo y sus órganos. Este es el principio de la reflexología podal. En ella, mediante el masaje, se puede influir a modo reflejo sobre los correspondientes órganos y vísceras, a parte de la importancia diagnóstica que tiene. 

Esta técnica posee innumerables beneficios: 

es relajante, reduce el estrés, mejora la circulación, permite la liberación de toxinas, equilibra los distintos sistemas, revitaliza energéticamente y actúa de forma preventiva.

Para los que vivimos de forma contínua en la cabeza, los masajes de pies son "la toma de tierra" necesaria e imprescindible para encontrarnos aquí y ahora. Para estar presentes y tranquilos.

2...  Tui Na chino:

El Tui-Na es una terapia manual en la que se combinan maniobras de masaje, movilizaciones, digitopuntura, tracciones y manipulaciones.
Mediante estas técnicas se consigue estimular el flujo de Qi (energía) y Xue (sangre) del organismo, regular los órganos internos y equilibrar energéticamente el organismo.

Esta es una técnica de masaje altamente eficaz y de gran poder descontracturante que estimula el poder de autocuración y reequilibrio del organismo de una manera no agresiva y sin efectos secundarios.

3... Lomi Lomi Nui: 

El masaje hawaiano o Lomi Lomi actúa no sólo sobre el cuerpo, sino también sobre la energía vital.

Mantiene la relajación de cuerpo y mente
Mejora la imagen del cuerpo y hace darse cuenta de ello, por lo que mejora la autoestima. Nos alegra la vida.
Aumenta los niveles de energía, ya que menos energía es utilizada en mantener el cuerpo tenso y estresado.

Ayuda a desbloquear emociones reprimidas.
Puede servir como introductor a estados meditativos y a la relajación profunda.

Aumenta la sensibilidad y capacidad de percepción.
Aumenta la conciencia del propio esquema corporal.

El cuerpo nunca miente, atendamos su necesidad.

“El cuerpo avisa”, no solamente con voces o síntomas tan apremiantes como el  hambre o la sed, sino otros avisos más sutiles como la necesidad de un descanso repentino o la atención inmediata a ciertos malestares.

El Cuerpo  Sabio posee las respuestas. Atendamos sus mensajes.

Masajes Orientales de Alta Calidad para el Bienestar